LOS PARTIDOS DE DERECHA EN, LLANES, ASTURIAS O ESPAÑA. ¿PORQUÉ HAN PERDIDO EL PASO CON EL CIUDADANO?

El título de post es la realidad constatable de una derecha que vive instalada en la crispación, el enfrentamiento y la negativa a todo aquello que se proponga desde la bancada ideológica opuesta a sus creencias políticas, aunque ello suponga perjudicar gravemente a la ciudadanía con medidas que suponen una ayuda en momentos difíciles.  Hoy hemos tenido un ejemplo claro de esto que digo con el plan de ahorro energético presentado por el Ejecutivo. La norma ha salido adelante con un amplio respaldo -187 votos a favor, 161 en contra y una abstención- a pesar del rechazo de los tres principales partidos de la oposición -PP, Vox y Cs-. El real decreto ley, que se tramitará como proyecto de ley para que los grupos políticos puedan introducir enmiendas en el texto definitivo en un plazo de apenas un mes, incluye también ayudas para el transporte ferroviario, entre las que se encuentran la gratuidad de determinados abonos de Renfe, así como becas al estudio o ayudas a los transportistas. Como contrapartida, los socios parlamentarios de la coalición PSOE Unidas Podemos les han arrancado varios compromisos, entre ellos un plazo de cuatro semanas para presentar enmiendas a la norma, y una más para que se constituya la ponencia.

    Composicion del arco parlamentario en el Congreso de los Diputados

Cuando hablamos de polarización en la política, hablamos del grado de división o fractura que hay en una sociedad entre individuos o grupos por motivos políticos, de ingresos, religiosos, territoriales, etc. En el ámbito de la política, la polarización ha sido entendida tradicionalmente sobre la base de criterios ideológicos. Según esto, la polarización expresa el grado en que los partidos políticos se parecen en las principales líneas de división ideológica, siendo la de izquierda-derecha la más importante. Cuanto mayor es la distancia que separa las posiciones de los partidos, mayor es el nivel de polarización. Esta situación, se viene produciendo de forma constante en nuestro país desde que se celebraron las últimas elecciones generales en el año 2019, donde el bloque de la izquierda superó al bloque de la derecha, por escaso margen, pero logró llegar al gobierno después de haber pactado con los partidos nacionalistas. Esto en el PP y Vox ha supuesto una afrenta, ya que tildan a dichos partidos de antidemocráticos, pese a obtener el respaldo que tienen por votación libre y legitima, independientemente de que se coincida o no con su ideario político. Celebres han sido los descalificativos manifestados al gobierno actual que está en ejercicio en nuestro país, el más mentado ha sido el de “gobierno Frankenstein”, pese a que el PP ha pactado en gobiernos regionales con como Castilla-León con la ultraderecha pese al rechazo que manifestó el Partido Popular europeo a dicha alianza https://cutt.ly/QXXypuP Ósea, que para exigir a los demás que no pacten con los partidos nacionalistas se les llena la boca, sin embargo, cuando ellos pactan con la ultraderecha adoptan la posición de la avestruz, cabeza al suelo y hacer que no ven nada ni tienen relación con dicha formación política.

       Resultados de las elecciones generales del 2019

Esta oposición destructiva hecha por los partidos de la derecha, Vox y PP, “del no a todo” que emprendieron desde los resultados de las elecciones del año 2019, nos facilitó a la ciudadanía una idea precisa de la alternativa que son a los problemas que tenemos los ciudadanos. Esto sin entrar en la simpatía o fobia que pueda tener cada ciudadano de los partidos políticos, ya que muchos como el que escribe este post no militamos en ninguna opción política. El único interés y objetivo que tienen los partidos de la derecha es llegar al poder, para dichas formaciones no existe la “política de Estado”, una prueba evidente de lo que digo lo estamos viendo con la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y la postura que lleva adoptando el PP, dicha situación ha propiciado que el mismo lleve de forma interina desde diciembre del año 2018, pese a ser llamados a capitulo por la Comisión Europea https://cutt.ly/mXXoEH7 Pues bien, esta estancia en la oposición salpicada con multitud de escándalos judiciales que tiene en los tribunales el PP, con condenas incluidas como partido político, le ha llevado a una deriva donde la anti política es el único camino que han encontrado para combatir al gobierno actual. Para ello les sirve todo aquello que sirva para desalojar a los socialistas de las instituciones, un ejemplo menor, lo tenemos los asturianos en Llanes, donde un gobierno, integrado por un partido “tribu” antisistema, VecinosxLlanes, con cuatro concejales de una corporación de 17 concejales, gobierna con él PP y tres tránsfugas. Este PP es el que llama “gobierno Frankenstein” al gobierno de Sánchez, pero asume como propio un gobierno donde el respeto a la ley se salta de forma indecente pese a tener múltiples condenas de la justicia y órganos de la Administración con personalidad jurídica.

La derecha política, sabe vivir bien cuando está en el gobierno de un ayuntamiento, comunidad autónoma o gobierno central, sin embargo, cuando tiene que vivir en la oposición la cosa es harina de otro costal. Un ejemplo de lo que digo lo estamos viendo en Asturias actualmente con el “gallinero” montado en el PP asturiano por el señor Feijóo. El cual ante las perspectivas electorales nada halagüeñas de las elecciones del año que viene con el cartel de Teresa Mallada, ha abierto la “caja de Pandora” con el fin de desbancarla de candidata. Una cualidad de la derecha es que cuando la meta del gobierno no es alcanzable, saca su lado más cainita para devorar a sus hijos con el fin coger un atajo, sin embargo, los atajos terminan siendo una soga que sirve para ahorcarse al percibir el ciudadano cual es el verdadero motivo que mueve a dicho partido político. En la oposición, la derecha es como un azucarillo que cae en el café, se disuelve plácidamente sin ser alternativa de nada al carecer de propuestas con las que cautivar al ciudadano, más allá de las “performance” a los que nos tienen acostumbrados. Si a este hecho, añadimos que la base electoral del PP está condicionada por estar constituida por una minoría de ciudadanos con un poder adquisitivo elevado y unos intereses que no coinciden con las necesidades mayoritarias de la ciudadanía, tienen que recurrir al engaño y la promesa hasta alcanzar el poder, después vuelven a su esencia con políticas que ignoran las necesidades y requerimientos mayoritarios de la ciudadanía. Ejemplos de esto último los tenemos en multitud de ejemplos, Ayuso concederá becas para estudiar en centros privados a familias con ingresos superiores a los 100.000 euros anuales https://cutt.ly/jXXxqSD,  el Gobierno de Andalucía aprovecha el coronavirus para "perdonar 400 millones de euros" a la COPE https://cutt.ly/sXXxQJO, El cierre de consultorios en el mundo rural provoca la primera gran crisis entre PP y Cs en la Junta de Castilla y León https://cutt.ly/oXXckrj, etc.

Este alejamiento de la ciudadanía por parte de los partidos de derechas, tiene como consecuencia un descredito que termina alejando a la ciudadanía de todo aquello que no aporta nada a sus problemas y necesidades. La dirección de Pablo Casado en el PP nacional terminó de forma abrupta, tras tratar de meter en vereda a la baronesa de Madrid tras multitud de desencuentros. La situación terminó desencadenando su salida de forma precipitada, después de que aquellos que le auparon y acompañaron a la dirección de dicho partido, le dieran la espalda como Judas a Jesucristo, un ejemplo, Cuca Gamarra. El señor Feijóo ha aprendido la lección de lo sucedido con Casado y ha optado por dejar hacer aquellos barones con mando en plaza (ganadores de elecciones en comunidades autónomas), al resto ha optado por “meter la cuchara” con el fin de colocar a peones que le guarden pleitesía más allá de buscar políticos que aporten ideas y propuestas que mejoren la vida de los ciudadanos. A todo lo anterior, tenemos que sumar que las caras visibles de los partidos de derechas no son los verdaderos zares de dicha estrategia. Los que diseñan y planifican todo lo que sucede son personas que no forman parte del partido, sin embargo, son los que ponen recursos económicos y medios de comunicación al servicio de la causa. Estos, ni están ni se les espera, su labor es silenciosa y discreta del circo político al que nos tienen acostumbrados sus “mulilleros” diariamente.

Para terminar el post, quiero decir que el problema de la derecha española no es que haya perdido el paso con el ciudadano, el verdadero drama de dicha opción política es que no busca encontrarlo… Si no que busca que el paso le encuentra a ella y eso francamente no es difícil, es imposible.

Ya lo dijo Séneca: “Cuando se está en medio de las adversidades ya es tarde para ser cauto”.