El 8 de junio se subía a la web del Ayuntamiento de Llanes un comunicado, en el cual se reflejaba una cuestión privada del señor Enrique Riestra, con respecto a un juicio celebrado en Oviedo en el que nada se dirimía con respecto al Ayuntamiento de Llanes https://bit.ly/3tuHLay El hecho venía de cuestiones personales ajenas a dicho ámbito. Esta cuestión anómala, por cuanto supone la utilización de los recursos públicos en beneficio de un particular, es algo que de forma recurrente utiliza el señor Riestra y su partido político VecinosxLlanes, cuando tienen que contestar a cuestiones ajenas al ayuntamiento de forma gratuita para su bolsillo. Lo hacen con la complicidad y silencio de las demás personas que integran dicho gobierno municipal, PP y tránsfugas. Si buscamos en la web municipal, nos encontraremos con el siguiente hecho, en los 2.000 últimos comunicados realizados por el gobierno municipal del señor Riestra nos encontramos con los siguientes:
- Réplica de alcalde de Llanes a Gimena Llamedo, presidenta de la gestora que aún sigue gobernando el PSOE llanisco https://bit.ly/3HfxSTR
- El alcalde de Llanes considera una burla a los vecinos las partidas del Presupuesto del Principado para el concejo https://bit.ly/3O4MoQs
- El alcalde de Llanes envía un listado de peticiones del concejo al presidente del Principado para incluirlo en los presupuestos generales de la comunidad https://bit.ly/3xHzbIb
- El alcalde de Llanes trabaja para invertir y mejorar Posada y el conjunto del concejo https://bit.ly/3tu7H6g
La pregunta que me provoca dicha situación como ciudadano ante dichos hechos, es la siguiente, ¿Es lícito la utilización de dinero y recursos de la administración en el interés de uno propio, con el fin de mejorar su imagen pública? Los recursos públicos, se convierten en objeto de deseo para su manipulación, por algunos políticos que atraviesan situaciones difíciles en el ámbito de su desempeño político, como es el del señor Riestra.
Actualmente la manera de hacer política ha cambiado. Estamos viviendo un entorno de desconfianza y falta de credibilidad en los políticos y los partidos. Es por ello, que resulta cada vez más complejo diferenciarse, generar una propuesta de valor para la ciudadanía y proyectar credibilidad y confianza. Por lo tanto, la atención se dirige al político como tal, más allá del partido que represente. Esto genera que la tendencia a diferenciar y a posicionar al candidato o actor político, se vuelva la estrategia a seguir. Así que, de la mano de estrategas en imagen política, el político debe de generar una estrategia 360º (estrategia mediante la cual las organizaciones generan conversación, agendan temas y movilizan información con sus oyentes internos y externos en base a los objetivos estratégicos de la organización). La “marca personal” de un político se ha convertido pues en una tarjeta de presentación crítica, él dilema se concentra en la siguiente frase, “el que no se distingue, se extingue”. En el caso del señor Riestra, que vino a sustituir a un gobierno socialista salpicado por multitud de inhabilitaciones, la ciudadanía llanisca se ha encontrado con esa “vieja política” en su modos y maneras en cuanto al caudillismo que en sus peores momentos gobernó Llanes, con el actual secretario general de la agrupación socialista, Antonio Trevín. El resultado del gobierno del señor Riestra son múltiples frentes abiertos con la justicia y con otras administraciones, como, la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, Patrimonio del Principado, gobierno regional, etc. Con una insatisfacción de la ciudadanía en aumento, el señor Riestra recurre a todo lo que tiene a mano, incluso sus asuntos privados, vulnerando los más elementales principios de la decencia política. El señor Riestra, por mucho que día tras día utilice los medios públicos en beneficio propio, su gestión tras siete años en el consistorio se ha visto salpicada de graves errores que han significado un grave quebranto para las arcas públicas del Ayuntamiento de Llanes, como, los 9.000 euros de multas que lleva pagados a Confederación por el saneamiento de 25 vecinos de Nueva.
El gobierno municipal que actualmente gobierna el Ayuntamiento de Llanes está constituido por un grupo de personas, que él principal pegamento que les une son las retribuciones que perciben alguno de ellos por carecer de ocupación fuera de la política https://bit.ly/3M9e6uS Es lo que llamaríamos un gobierno “extractivo”, unos perciben y otros guardan silencio sobre dicha situación, convirtiéndose en cómplices de dicha anomalía. Si a dicho hecho añadimos que existen otros actores muy señalados de la sociedad llanisca, que sin estar en el ámbito público ejercen de cancerberos para cuidar e intentar que el mismo sé mantenga contra viento y marea, como queda acreditado en redes sociales, el dibujo que tenemos es tétrico. Los ciudadanos que vivimos en Llanes, tenemos el derecho y el deber de expulsar de la política a aquellos que vinieron a la misma a hacernos la vida más difícil… Nos lo debemos, primero a nosotros mismos que sufrimos las consecuencias de este y segundo, a todos aquellos que vienen por detrás y que por edad no tienen el derecho a elegir, pero si a sufrir a personajes como los que integran el actual gobierno municipal de Llanes.
Ya lo dijo William Faulkner: “Se puede confiar en las malas personas. . . No cambian jamás”.
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