Hoy leía en un diario del oriente de Asturias, que el 89% de la militancia socialista de Llanes respaldó el gobierno de coalición PP-PSOE de Llanes propuesto por la Comisión Ejecutiva, para el municipio tenga un alcalde popular en los primeros dos años de la legislatura, y un regidor socialista en los dos últimos https://tinyurl.com/33mabemk Esta condición no es baladí, ya que el “perdedor”, Trevín, podría volver a repetir como candidato a la alcaldía llanisca al estar como alcalde en funciones a la convocatoria de elecciones, como recogen los estatutos actuales en el PSOE. No habría primarias, salvo el voto en contra de un elevado porcentaje de afiliados como sucedió en Gijón. Con 71 años, el “joven” candidato socialista podría volver a optar a regenerar la política llanisca con su eterna juventud.
Una cuestión que quiero recalcar por engañosa que recoge la noticia, es el índice de aprobación para dicho gobierno de coalición, ateniéndose a la afiliación y no a los afiliados que participaron en dicha asamblea. Este detalle es importante puesto que revela realmente cuantos afiliados están de acuerdo con la ocurrencia del “perdedor” y de su Comisión Ejecutiva. Si tomamos como referencia el censo de participación de las primarias socialistas celebradas el 3 de abril del 2022, donde votaron 214 afiliados (123 a Trevín y 94 a Ángel), ayer se aprobó la coalición de gobierno PSOE-PP, con la aprobación de 50 afiliados, 2 votaron en contra y 3 abstenciones. Si cogemos la participación de las primarias, tenemos que la aprobación del gobierno de coalición fue aprobada con un 23,36% de la afiliación socialista que participó en las primarias. Esta aprobación puede que fuera incluso menor, ya que hay que tener en cuenta que ahora hay más afiliados que cuando se celebraron las primarias, por lo que probablemente no se alcance ni el 20% de la afiliación que hoy tiene dicha agrupación socialista. Esta es la cruda realidad y no lo que se publica en prensa facilitado por el “perdedor” Trevín en su nota de prensa a los medios de comunicación.
Persiste el “perdedor” candidato socialista, en la afirmación de que cuenta con la aprobación del gobierno regional y gobierno nacional. Probar lo que se dice probar, no ha probado nada en dicha asamblea a sus compañeros. De su boca solo han salido buenas palabras para engatusar. Documentos no ha presentado ninguno, pero lo tiene muy fácil si de verdad lo que ha dicho es cierto, se hace realizando una declaración pública por parte de las personas que le han mostrado dicho apoyo para Llanes. Si como parece no hay nada en dichas declaraciones realizadas, los compañeros del PSOE y la ciudadanía de Llanes, tienen que ir sacando las conclusiones pertinentes al valor que tienen los órdagos que lanza dicho concejal “perdedor”. Es buscar en la mentira la salida apurada a situaciones difíciles donde busca el interés personal y no el beneficio de los ciudadanos a los que representa. Esta forma de hacer política tiene un mentor que ha exportado a todo el mundo fu forma de hacer política, viene del otro lado del Atlántico, es Donald Trump.
Quiero manifestar al concejal “perdedor” que vaya acostumbrándose a demostrar a la ciudadanía llanisca todas las afirmaciones que realiza, puesto que en política no vale todo, sobre todo cuando uno está en apuros. En la actual política española nos intentan acostumbrar a que sí vale todo, siempre y cuando sirva para atacar al adversario político. Podría suponerse que el “vale todo” se tolera en épocas electorales pero- con independencia de que los políticos en Llanes, en el gobierno o en la oposición, siempre están en campaña y no mueven un solo dedo que no esté dirigido a la consecución de votos o a la menor pérdida posible de sufragios, lo cierto es que el “vale todo” se practica con profusión en cualquier momento y con ocasión o sin ella. El “perdedor” Trevín no ha arrancado todavía desde la oposición, pero ya nos está mostrando a la ciudadanía el camino que va a emprender los próximos cuatro años, acusaciones sin ningún tipo de prueba. El fin último es el famoso dicho de, “miente que algo quedará”. Pues bien, su ocurrencia ha tenido un respaldo minoritario de la afiliación socialista de Llanes… Todo lo demás es ruido baldío y estéril de lo que ha sucedido.
Ya lo dice un proverbio judío: “Con una mentira suele irse muy lejos, pero sin esperanzas de volver”.
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