El 3 de abril se celebraron las primarias en la agrupación socialista de Llanes con el resultado siguiente, lista encabezada por Antonio Trevín Lombán 123 votos (56,68%), lista encabezada por Ángel Morales Fuentecilla 94 votos (43,32%). Hoy quiero dedicar este post al (56,68%) de militantes, que con su buena voluntad eligieron a un candidato que pensaban podía representar mejor los intereses socialistas en dicho municipio.
Par empezar diré que desde la llegada del señor Trevín a la secretaria general de dicha agrupación llanisca, su dinámica política ha estado sembrada de error tras error. Empezó con la cantinela del “Pacto de Posada” como emblema de algo tangible, sin embargo, el mismo no tiene ningún recorrido puesto que se ha desarrollado fuera del ámbito municipal, con lo que no se ha vulnerado ninguna ley. Lo único que la ciudadanía ha podido saber una vez leído el mismo, es que hubo un reparto de concejalías y liberaciones por las que están cobrando unos ingresos económicos personas que carecen oficio en su vida civil fuera de la política. De este pacto lo que se puede y debe reprobar, es que parte de los concejales afectados están actuando a espaldas de sus electores, ya que en ningún momento de la campaña electoral donde fueron elegidos comunicaron a sus votantes que iban a ser tránsfugas, son los concejales Marián de la Llana, Iván García y Priscila Alonso. Por otro lado, el que está encantado con esta situación es el señor Riestra, persona que antepone cualquier hecho o principio a la permanencia de su poltrona en el Ayuntamiento, para lo que utiliza el vasallaje que le guardan dichos concejales bien pagados.
El segundo error cometido por el señor Trevín es la carta enviada al presidente del PP nacional, Alberto Núñez Feijóo. La misma, es inoportuna y refleja la prisa y ganas que tiene el señor Trevín por ocupar la alcaldía llanisca, sin importar los daños que se pueda ocasionar a su partido, compañeros y ciudadanía al eludir cualquier principio que debe atesorar un político en el desempeño de su función pública. Con dicha misiva, se desmiente la estrategia emprendida por el secretario general de su partido, Pedro Sánchez, el cual después de entrevistarse con el señor Feijóo no pudo consensuar que gobernara la lista más votada por no establecer el señor Feijóo el cordón sanitario con la ultraderecha (Vox) en todo el territorio nacional. El señor Feijóo pide al PSOE que rompa con los partidos independentistas, pero a la vez, se tapa la nariz y evita la foto con un partido de ultraderecha (VOX) como hemos visto en la investidura del señor Mañueco en la comunidad de Castilla-León. Es la doble moral que tanto se percibe en algunos políticos del arco parlamentario español. Entonces, viene el señor Trevín y remata la faena con la siguiente frase escrita en la carta enviada: “Compruebo estos días, como su liderazgo está aportando nuevas propuestas al panorama político español. La de respetar el gobierno para el partido más votado, mereció especialmente mi atención”.
Como ciudadano de Llanes, ajeno a cualquier militancia en un partido político, creo y pienso que algunos de los 123 electores que eligieron al señor Trevín el 3 de abril en las primarias socialistas, no estarán contentos y habrán reflexionado con respecto a su decisión de elegir a dicha persona para que les represente. Dos son las cuestiones que desde fuera como ciudadano observo y deben de hacer reflexionar a dichos militantes, la primera es que el señor Trevín va por libre con respecto del resto del partido en el que milita. Uno desconoce si desde dentro del PSOE se tomará alguna medida correctora que evite que dicho responsable vuelva a poner en entredicho la estrategia colectiva que hay instaurada, pero lo que es cierto es que si no lo hacen lo hará la ciudadanía en cuanto tenga la oportunidad de manifestarse votando. La segunda cuestión que uno observa es que el señor Trevín actúa y representa una forma de hacer política desfasada de la realidad que vivimos en el municipio de Llanes y en cualquier lugar de nuestro país. Se busca estar en los medios de comunicación con cuestiones crematísticas y no con los problemas reales a los que se ven expuestos y preocupan a la ciudadanía llanisca. Esto traerá consigo un alejamiento de su persona y partido al que representa, puesto que lo que percibe la ciudadanía es que no ha venido para resolver los problemas que existen, sino que ha venido para llegar al gobierno del Ayuntamiento a cualquier precio y manejar el presupuesto municipal de 19.000.000 de euros. Si a este hecho le añadimos que su paso por la política llanisca ha sido calamitoso por la pésima gestión que arrastra como recogen las hemerotecas, tenemos un cóctel que la ciudadanía tiene que evitar como la peste bubónica.
Los afiliados al partido socialista tienen ante sí un reto y dilema que no pueden evitar y que solo ellos deben resolver a fin de que la calamidad política que actualmente gobierna el Ayuntamiento de Llanes, él señor Enrique Riestra, no se perpetúe. Uno cree y piensa que algunos de esos afiliados fueron engañados con falsas promesas y confiaron de buena fe en el señor Trevín, lo que estamos observando nos está demostrando que no es la persona adecuada para ser alternativa de nada. Por lo tanto esta situación debe ser corregida por los propios afiliados y todavía están a tiempo de revertir dicha situación. Hay un año por delante, sí el PSOE quiere ser alternativa tiene la obligación de presentar una candidatura que destierre a la “vieja política” que encarna el señor Trevín y den paso a una alternativa rupturista con el pasado político del PSOE llanisco. Lo primero, es presentar cuando llegue el momento un cartel o alternativa política con la que concurrir a las elecciones municipales del 2023 con una renovación profunda de caras y personas, sin mochilas ni hipotecas, donde la ciudadanía sea el verdadero centro de lo que sucede en Llanes y que el gobierno actual se pasa por el "forro" como llevamos viendo desde que están gobernando en el Ayuntamiento de Llanes, con cuestiones como el saneamiento, la privatización de servicios, etc.
Los 123 militantes socialistas que votaron por él señor Trevín tienen ante sí un reto y un problema que resolver para el resto de los ciudadanos de Llanes que no tenemos afiliación política, como el que escribe este post. Sí este problema no se resuelve… Al final será la sabia ciudadanía llanisca la que tomará medidas para corregir la disfuncionalidad que representa el señor Trevín en la política llanisca.
Ya lo dijo Abraham Lincoln: “Se puede engañar a parte del pueblo parte del tiempo, pero no se puede engañar a todo el pueblo todo el tiempo”.
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