“O yo o el caos”, este es el mensaje que propaga el alcalde de Llanes, Enrique Riestra, lanzando el mismo en la prensa regional, Facebook o la página del Ayuntamiento si se tercia, un día sí y otro también. Pero quizás lo que los ciudadanos que residimos en el Concejo de Llanes nos tenemos que preguntar es, ¿Qué hay detrás de este lema que repite incesantemente dicho cargo público? Lo primero que hay que decir es que en dicho Ayuntamiento coinciden en un equipo de gobierno nueve concejales con ideología diversa, (Vecinos x Llanes, PP y tránsfugas). Los intereses que tienen los mismos como concejales se dividen en dos tendencias, si uno observa detenidamente su situación personal, están los que anclan su representación en la retribución que perciben del Ayuntamiento al carecer de ningún empleo del que vivir salvo la política o están los que aspiran con su representación política a “quizás” un día ser algo más que concejal, por ejemplo, alcalde de Llanes. Las dos tendencias comparten un nexo común, es el hecho de ponerse de perfil frente a los derechos de ciudadanos de Llanes a los que la ley ampara y el señor Riestra niega por sectario con el consiguiente coste que supone para las arcas públicas. Lo hemos visto con varios asuntos; el saneamiento de Nueva, la escuela de 0 a 3 años de Posada o el transporte escolar de los niños de Purón o la salida del consorcio de COGERSA, por ejemplo. Alguno de los concejales actuales, justifica su inacción en el hecho de no cobrar retribución por parte del Ayuntamiento para justificar su silencio. Lo que como ciudadano me produce dicha acción, es que ante los problemas de los ciudadanos en política hay que venir de casa “llorado”. El pisar charcos forma parte de lo que un político tiene que hacer, siempre respetando lo que la ley dice. El silencio mantenido por dichos concejales ante los problemas acaecidos, lo único que retrata es que estos están incapacitados a futuro para cualquier representación municipal si tenemos en cuenta lo visto… Es el silencio siciliano “omerta” ante los atropellos que comete el señor Riestra.
El 4 de mayo del 2019 poco antes de las elecciones municipales un diario regional publicaba lo siguiente, “Con nosotros la corrupción no tiene cabida”, sostiene Vecinos https://bit.ly/3CjyaEW En la misma se dice lo siguiente, “El actual alcalde y candidato, que llegó al poder en 2015 tras el pacto entre su propia formación, Foro, PP e Izquierda Unida, insistió en el veto al PSOE, al que considera responsable de “haber tejido una red” que aún necesita, a su entender, otros cuatro años para romperse. “Con nosotros la corrupción no tiene cabida”, afirmó el señor Riestra. Sin embargo, lo que hoy tenemos en el Ayuntamiento de Llanes es un lema que el señor Riestra atribuía a los socialistas, “Aquí regía el dicho de ‘Al amigo todo, al enemigo nada y al indiferente la legislación vigente’ https://bit.ly/3GjRTaP, sino que el señor Riestra lo ha mejorado a peor, al negar a los ciudadanos de Llanes lo que la ley recoge como derechos amparándose en informes de funcionarios que están sometidos a dicha ley. Este hecho se ejecuta de la siguiente forma, por el equipo de gobierno, se pleitea con los ciudadanos hasta agotarlos económicamente con el fin de que desistan de reclamar sus derechos, mientras, los ciudadanos se tienen que pagar su defensa con el dinero propio y la del señor Riestra con los impuestos que pagan al Ayuntamiento que preside. La situación de deterioro es tal, que el señor Riestra tiene que recurrir a señuelos con el fin de sustraer la atención de los llaniscos de aquello que les preocupa, para ello ha fijado el foco en políticos que no están en el Consistorio llanisco. Célebres son sus ataques a el señor Barbón, Trevín o la señora Llamedo, todo ello aderezado con el ninguneo que efectúa del grupo de la oposición acusando a todo el mundo de proteger y amparar comportamientos poco éticos después de que los tribunales condenasen a determinados militantes socialistas que hoy ya no están en la política. Su psicosis llega a tal extremo que en el pleno del 14 de enero de este año https://bit.ly/3D7oCh4 presentó una moción electoralista y surrealista para echar en cara a los socialistas comportamientos delictivos a concejales y militantes socialistas, que no tuvieron ningún recorrido más allá del electoralista, ya que no se conoce que el señor Riestra haya ido a la fiscalía o tribunales. De lo único que tenemos conocimiento es que el señor Juan Carlos Armas ha sido denunciado a la fiscalía por un contrato de poda de árboles que su concejalía de Obras y Medioambiente adjudicó https://bit.ly/3BWkXDs
La “riestracracia” que inunda actualmente el Ayuntamiento de Llanes siembra de insidias el panorama político del concejo llanisco. A los ciudadanos sin pertenencia política como este que escribe en él blog, le produce indiferencia la propaganda fatua que propaga el señor Riestra con el único fin de distraer y ocultar su incapacidad para gobernar un municipio que no se merece tener una persona como él al frente del Ayuntamiento. El señor Riestra es un absolutista, con maneras coercitivas y groseras con una ambición desatada. Su paso al frente del Ayuntamiento está causando destrucción, al fijar una subcultura de “servilismo” y mediocres que genera una falsa lealtad a una causa que se basa en la necesidad de conservar la nómina. Su cultura orgánica de funcionamiento en el Ayuntamiento se hace irrespirable, con él único fin de hacer una organización a su medida. Todo aquel que no se pliegue a sus designios es purgado, el fin último es tener a su alrededor solamente vasallos. Por todo ello, el hiper "liderazgo" (por llamarlo de alguna manera) tóxico que ejerce en el Consistorio presenta cualquier ausencia de crítica ya que sus interlocutores no están en Llanes (concejales del equipo de gobierno), están en Oviedo en el parlamento regional, siendo Teresa Mallada su interlocutora. Con ello ha conseguido un patrón de concejales que integran su equipo de gobierno a la “búlgara”, donde la unanimidad es un señuelo de lo que es un equipo de gobierno al servicio de la ciudadanía. El lema del comienzo del post que el señor Riestra trata de inculcar a los ciudadanos llaniscos debería ser, “Yo, soy el caos”.
Ya lo dijo Confucio: “Cuando en un país reina el orden, es una vergüenza ser hombre pobre y común. Cuando en un país reina el caos, es una vergüenza ser rico y funcionario.”
Excelente descripción para un gobierno municipal de lo más inepto.
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